¿Quién soy? ¿Para qué escribo?

Para quÉ Escribo:

Escribo para dar salida a los sentimientos que vivo cada día.

Escribo para recopilar recuerdos de mi familia

Escribo para sanar mi alma decaída.

Escribo para recordarme que estoy llena de vida.

Escribo para colaborar y dar gracias a estos Talleres   de Escritura.

- ¿Cómo escribo?  ¿Como es mi rincón de Escritura?

A través de la ventana de mi buhardilla se divisa el Pinacho de un ciprés, un poco más lejos las torres de las Catedrales. -Hay Silencio. - La inspiración me llega lo mismo haga sol, frio, o viento. -Lo que importa- es la luz natural y los sentimientos.

Como Escribo.

No escribo a golpe de pluma.

Soy un poco de acción retardada; tengo que pensar una frase, un episodio que haya vivido y tirar de ese hilo, ese hilito es como el reguerito que sale de un manantial y se atreve a mojar las briznas de hierva que hay alrededor de la fuentecilla que en épocas de lluvia nace en las regateras de un prado, o en la linde de un camino, en la que los campesinos no han cuidado, y la pequeña fuentecita esta escondida entre hierbajos, que ni siquiera sirven de pasto para el ganado; el hilillo de agua al asomarse al verdor que le rodea se siente útil y se adentra en ese mundillo que acaba de descubrir. Al principio despacito, vergonzoso; luego según va cogiendo confianza se desliza, resbala y va más alegre y confiado con la fuerza que le anima a seguir bordeando el mundo vegetal por el que se ha adrentado; sin preguntarse - ¿quién le da la energía y valor para seguir adelante.? De pronto se da cuenta de que es más ancho, que corre más y que se ha convertido en un regato donde algunas especies de animalillos ponen sus huevos, pero el sigue corriendo, corriendo y aceptando la compañía de otros regueritos que salen de entre otros manantiales; y se juntan riéndose y animándose del bien que se deslizan entre los cantos rodados o las pequeñas lastras de la ribera; se maravilla de que en su superficie nazcan plantas de pequeñas hojitas que los humanos llaman marujas o regajo.

 - Pues así es como nacieron algunas palabras en mi interior; pequeñas gotas de agua que se fueron juntando hasta formar una idea, que más tarde se convirtió en palabra, esta se juntó con varias y formaron silabas y las silabas bien emparejadas formaron salvajes versos, vellos en colorido, pero sin arte; otra rama de este regato de palabras fue pulido por una buena profesora y las palabras decidieron ir a la escuela para ser formadas, y cada una elegir la disciplina más acorde a su forma de ser útiles recibiendo nombres en literatura.